TYC y Productividad

El Observatorio de la Sostenibilidad en España realiza estudios anuales sobre la inversión en I+D en relación al PIB. En su estudio del año 2011 concluyen que el gasto en I+D de un país es un aspecto clave para incrementar la productividad y generar crecimiento a largo plazo, se considera a su vez un indicador fundamental del potencial económico de un país. Esta conclusión no es ajena al mundo de la empresa. Ya en el año 2006, J. I. LÓPEZ SÁNCHEZ, B. MINGUELA RATA, A . RODRÍGUEZ DUARTE y F. D. SANDULLI, escribieron un artículo en “Cuadernos de economía y dirección de la empresa” que concluía los efectos bondadosas de la inversión en TIC sobre la productividad de la empresa. Citando otros trabajos, estimaban que sobre una inversión de un dólar, el retorno en producto de la empresa se estimaba enmás de 2.5 dólares. “Por ejemplo, las TI tienden a reducir los costes de comunicación, lo que permitiría a las empresas acceder a sistemas organizativos menos jerárquicos donde trabajadores cada vez mejor formados asumiesen mayores niveles de responsabilidad en la toma de decisiones. O también, la mayor capacidad de procesamiento de información generada por las TI permitiría una transición desde los tradicionales sistemas de producción en masa hacia sistemas de producción más flexibles, al posibilitar la existencia de grupos de trabajo autogestionados, mayores niveles de descentralización en la toma de decisiones, menores inventarios de trabajo en proceso, mayor capacidad de introducir cambios en las líneas de producción, etc (…) Una utilización avanzada de Internet conduciría a una red integrada, donde los socios estarían  conectados entre sí vía Internet, de tal forma que cada uno de los participantes podría concentrarse en sus core business mientras que los restantes procesos de negocio se subcontratarían a otros socios de la red.” Teniendo en cuenta estos datos, que en el mejor de los casos provienen de estudios de más de 7 años, la situación en España en materia de TIC no ha mejorado ostensiblemente. Dos gráficos recientes son significativos al respecto.

Si bien en la administración se está mejorando en la obstaculación burocrática a las empresas, el rango de inversión en equipamiento y software e innovación se encuentra claramente a la cola de los países de la OCDE.

En este mapa se puede observar que España se encuentra en el año 2019 a la cola de los países europeos en inversión en innovación. Alguna región está en una situación escandalosa. Asturias tampoco supera la media europea en innovación, siendo superados claramento por nuestro vecino peninsular. Si queremos ser una región próspera y con posibilidad de futuro, todos los sectores desde las ganaderías, servicios, pequeño comercio o gran empresa de producción debe asumir la necesidad de inversión en tecnologías de la información y comunicaciones que no solamente permita competir en un mercado global cada vez más fiero, sino incrementar su productividad que conlleva aumento de beneficios, mejoras en las condiciones laborales y el aumento del tamaño de las empresas, algo que en España supone un inconveniente para competir con nuestros vecinos en el mercado internacional.